Caliwood, la casa del cine colombiano

El primer museo de la cinematografía en la historia del país es, también, el único espacio dedicado a la evolución del séptimo arte nacional desde 1813 hasta la década de 1980.

HUBO UN TIEMPO en el que cinco jóvenes caleños solo veían el mundo a través de un lente. Una época en la que la música y el cine, acompañados de drogas, sexo y alcohol, eran las únicas razones para vivir. Años cuando las cámaras no eran más que una extensión del corazón y una obsesión sin límites.

Fue en este tiempo cuando Andrés Caicedo, Luis Ospina, Carlos Mayolo, Sandro Romero y Carlos Palau se bautizaron como el Grupo de Cali o Caliwood, y con filmadora en mano evocaron la frase de “El país se derrumba y nosotros de rumba”. Ellos marcaron el inicio y el final de una era del cine colombiano que no volverá, pero que se conserva intacta en Caliwood, el museo cinematográfico más grande del país, ubicado en la capital del Valle del Cauca.

El lugar fue fundado en 2008 por Hugo Suárez Fiat, amante del séptimo arte pero, sobre todo, de los museos. Actualmente, se exhiben allí cerca de 7.000 objetos entre los que se destacan 400 cámaras fotográficas antiguas, 250 proyectores de cine fabricados en diversos países del mundo —y que soportan un rango amplio de milimetrajes—, 110 afiches de películas colombianas en exposición permanente y 120 adicionales que, en bodega, descansan hasta cuando haya más espacio para exhibirlos.

FOTOS: SANTIAGO SALDARRIAGA / REVISTA CREDENCIA

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