Foto: Istock.
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17 de Febrero de 2023
Por:
Maese Luis

¿Cómo sacarle el mayor provecho a este electrodoméstico, más allá de usarlo para cocinar papa y yuca?

TAGS: Gastronomía

Mejores usos para la air fryer

*Artículo publicado en la revista impresa de febrero del 2022

EN FEBRERO de 2009, escribí en estas mismas páginas sobre un electrodoméstico que conmocionó las cocinas y la forma de preparar alimentos a mediados del siglo XX: el microondas. En ese momento describí a este singular horno como un gran “ayudante para descongelar carnes, pollo, pescados y algunos mariscos; para calentar líquidos como agua, leche o algunas comidas (excepto el pan); para derretir o fundir varios tipos de quesos maduros; para desgrasar bacon (tocineta), y para preparar maíz pira, más conocido hoy como palomitas de maíz”. Y nada de eso ha cambiado.

Lo que sí pasó es que hoy, a 13 años de esas palabras y cuando nadie creía que podía surgir de nuevo un aparato tan revolucionario, el mundo vio nacer a la air fryer. Ocurrió exactamente en 2010, año en que Philips presentó su patente de Rapid Air Technologies en una feria de electrodomésticos en Berlín. Aunque hoy en día existen freidoras de aire de todas las formas y colores, entre las que se destacan las de Oster, e incluso muchas han llegado a integrarse con hornos tostadores y con ayudantes de cocina, por regla general una fryer es un pequeño horno de convección en forma de barril diseñado para obtener una ‘fritura’ profunda sin sumergir la comida en aceite. La ciencia está en un ventilador que hace circular aire caliente a alta velocidad que genera una capa crujiente en algunos alimentos y que es similar a la que se logra con el proceso de freído tradicional. La mayoría de las freidoras de aire tienen ajustes de temperatura y temporizador y todas constan de una canasta que se encuentra adherida a una bandeja de goteo que encaja en el cuerpo del aparato.

Al igual que con su precursor el microondas, la air fryer no ha estado exenta de polémica. De un lado están los que afirman que cualquier horno de convección o tostador produce resultados iguales o mejores y que simplemente lo que se popularizó ahora es una moda y una forma. Están también los que la critican por su falta de potencia frente a otros hornos de convección. Y aparecen los que la encuentran chiquita. 

Sin embargo, la popularidad de la air fryer excede con creces a sus detractores quizás porque es sencilla y rápida de usar y sus resultados culinarios son notablemente ricos. Y como si faltaran argumentos a favor, también es cierto que sí genera un aporte real a la salud al reducir el consumo de grasas como consecuencia de evitar sumergir los alimentos en aceite. Esto le da un punto imbatible frente al microondas cuyos impactos al organismo no se han probado con certeza, pero se perciben como reales en el imaginario colectivo.

Como lo dije en su momento del microondas, y ahora para la freidora de aire: “Bienvenido el debate sobre la utilidad de este horno, sus usos, perjuicios no comprobados, experiencias favorables o desfavorables de todos quienes deseen participar en él”. Aún queda mucho por experimentar y por descubrir y, sobre todo, por comer.

Chips de remolacha 

Una vez fijamos el tema del presente artículo con Diego Montoya, editor de esta revista, le pregunté por su experiencia con la freidora de aire. Me comentó que desde que su familia le regaló una la ha estado usando bastante y que ha encontrado muy buenos resultados en el universo de rostizar vegetales, como las repollitas de bruselas, la zanahoria, la cebolla o la remolacha. Para Diego, y con razón, “la idea es lograr que la comida tenga un sabor un poco más complejo que el del único vegetal, por lo que mucho depende de las especias que se usen”. También, dice, dejar que los vegetales no solo se cocinen, sino que se doren bastante, para lo cual se le debe perder el miedo de dejarlas ese poquito de tiempo extra en la máquina, cuidando, claro está, que no se quemen. Eso sí, clave no olvidar un poquitito de aceite esparcido en las verduras para que la crocancia aumente y no se quemen las cosas rápido.

Ingredientes (para 4 personas)

2 remolachas grandes
2 cucharadas de aceite de oliva
Sal
Pimienta
Orégano

Preparación

Lavar y pelar las remolachas, cortarlas en rodajas muy delgadas, de máximo dos milímetros de grosor, y reservarlas en un bol. Para este proceso es ideal usar una mandolina, aunque no es indispensable.

Agregar el aceite de oliva, la sal, la pimienta y el orégano y masajear delicadamente las remolachas para que queden impregnadas.

Poner las láminas en la bandeja de la air fryer y hornear a 200 °C por aproximadamente 15 minutos o hasta que las piezas se vean crujientes.

Durante el proceso de horneado, conviene revisar cada 4 minutos más o menos para verificar que las piezas están sueltas (no pegadas) y para darles la vuelta.

Se sugiere servir para acompañar platos, para picar mientras se toma algún licor o para mezclar en ensaladas.

¿Y ADEMÁS DE LA REMOLACHA?

Esta receta también sirve para otros productos agrícolas como berenjenas, zanahorias, zucchinis, entre muchos. Solo basta con sustituir el vegetal y variar las especias para encontrar nuevas posibilidades. Especias que pueden ser también de semilla y no solo herbales: es decir, semillas de mostaza, distintos tipos de pimienta o incluso una gotita de canela. ¿Qué tal preparar unas hojuelas de zanahoria con chile picante o semillas de hinojo? ¿Qué tal unos chips de zucchinis con limonaria y pimienta? Se vale dejar volar la imaginación. Eso sí, hay que estar pendientes del tiempo de cocción porque, por ejemplo, las zanahorias requieren un poco más y los zucchinis, menos.

Espárrragos con paprika 

Ingredientes (para 4 personas)

1 manojo completo de espárragos
2 cucharadas de aceite de oliva
1 cucharadita de pimienta
1 cucharadita de sal
3 cucharaditas de páprika

Preparación

Retirar la base blanca de los espárragos. Ponerlos en un bol o bandeja y agregar el aceite de oliva, procurando que todos los vegetales queden cubiertos con una capa de grasa; para esto se puede utilizar una brocha o el aceite que viene en aerosol. 

Echar la pimienta, la páprika y la sal y resobarlos nuevamente para distribuir las especias uniformemente. 

Poner los espárragos en el recipiente de la freidora y hornear a 200 °C por 10 minutos, tiempo al cabo del cual se les debe dar una vuelta haciéndolos saltar para, finalmente, volver a hornear por 5 minutos más a la máxima temperatura. 

Fabulosos para acompañar carnes o pescados a la parrilla.