Óscar Naranjo

Terminaba el año 1985 con la imagen de Omayra Sánchez, la niña que marcaría la vida de los colombianos como símbolo de una de las tragedias naturales más devastadoras que ha registrado el mundo: la provócada por la avalancha que literalmente desapareció al municipio de Armero, Tolima, y que arrastró a la muerte a cerca de 23.000 personas.