El abrazo de la serpiente

NO CONOCÍA el cine. Nunca se había parado frente a una cámara. Aun así, Antonio Bolívar estuvo a punto de ganar un Óscar al encarnar a Karamakate, un poderoso chamán que guio al etnobotánico

En nuestra edición impresa de febrero le contamos quien es Cristina Gallego, la mujer que con su disciplina, juicio y organización como productora, hizo posible que Ciro Guerra filmara 'El abrazo de la serpiente'.

 

Los buenos resultados del cine colombiano en el último Festival de Cannes y la nominación al Óscar de la película 'El Abrazo de la Serpiente' han servido para que nuestras películas se roben la atención de noticieros, periódicos y revistas.

Hasta la lluvia jugó del lado de Colombia. Ciro Guerra, antes de empezar a rodar, vio llover 36 horas en el Amazonas.  Pensó, en ese momento, que de seguir el clima así, el rodaje naufragaría. Pero la lluvia, como si supiera que la película también es sobre ella, actuó de maravilla. Se lanzaba a la tierra con cada corte y se escondía con la palabra “acción”. Su talento escénico hizo posible que ese rodaje, grabado en la selva pura, se terminara con éxito.