Aviones

Les pasó a los habitantes del barrio Villa Santa Catarina en Sao Paolo. Era 1996. Un avión Fokker de pasajeros afectó dos manzanas de ese sector residencial. Les pasó a los habitantes del barrio Marco Fidel Suárez en Bogotá. Era 1979. Un avión Avro 1101 de Satena cayó sobre una casa del sector. Les pasó, ahora, a la dueña y a los visitantes de una panadería al occidente de Bogotá. Una avioneta se estrelló contra el local. Ese accidente -una tragedia de enormes proporciones- y los demás por el estilo, retan, sin embargo, todas las probabilidades.

Hoy es posible reproducir con bastante precisión el drama del vuelo MH-17 de Malaysia Airlines. El pasado 17 de julio el Boeing 777-200ER que realizaba el trayecto entre Amsterdam y Kuala Lumpur con 283 pasajeros y 15 tripulantes sobrevolaba Ucrania oriental cuando recibió el impacto de un misil tierra-aire, probablemente un Buk SA-11, disparado por las milicias separatistas que han declarado la guerra al gobierno de Kiev para forzar la secesión de los territorios donde hacen presencia y colocarlos bajo el control del Kremlin.

Dusty, un avioncito fumigador, ha soñado con competir y ser parte de la élite de los aviones más rápidos del mundo y mientras vuela fumigando los sembrados de su pequeña población, él se imagina cómo sería competir y ganarles a aquellos aviones concebidos única y expresamente para volar largas distancias en cortos periodos.