FOTO CORTESÍA EQUIPO DE PRENSA ANDRÉS CUERVO
26 de Mayo de 2021
Por:
Catalina Uribe Tarazona

En 2016, el artista barranquillero fue diagnosticado bipolar. Desde ese momento, dice, comenzó a vivir. Por estos días celebra el lanzamiento de un álbum dedicado a esa experiencia. 


“La música ha sido mi psicóloga y psiquiatra”: Andrés Cuervo

 

Usted tiene la teoría de que no hay plan B, C o D.Que el único válido es el A. Y también dice que el suyo era la música. ¿Por qué lo tenía tan claro?
Pienso que todos venimos a la tierra con la misión, el talento y el poder para convertirnos en la persona que queremos ser. Yo siempre he sabido que soy artista y que quiero ser cantante. Nunca quise ser abogado o ingeniero, ni ir a la universidad por si acaso no funciona aquí o por si acaso no funciona allá. Le he puesto toda mi energía, corazón, ganas y vida a esto que es mi carrera, y así seguirá siendo. Pienso que así deberíamos hacerlo todos con lo que realmente nos mueve por dentro.

 

Su música se escuchó en Estados Unidos y México antes que en Colombia. ¿Por qué?
Empecé primero en Estados Unidos y luego en México porque a mis 
18 años, cuando me gradué del colegio en Cali, tomé un avión y me fui a Miami a buscar una oportunidad como artista. Empecé paso a paso allá e hice un disco con Rudy Pérez. Luego viajé a México varias veces, tras lo cual grabé mi segundo disco, Este soy yo, y así fue como realmente empezó todo. Firmé con Universal Music y Televisa, y durante 45 semanas estuve en los primeros lugares con diferentes sencillos. México es un país supermusical y me absorbió de una manera positiva porque estuve allí trabajando sin parar. Pero mi intención siempre ha sido consolidarme en Colombia y que la gente de mi país me conozca. Por eso, siento que este es un nuevo inicio de mi carrera desde que empecé con No pidamos perdón, La tentación e Indecentes. Lo que hicimos con esos sencillos allá lo estamos haciendo aquí en Colombia con este nuevo proyecto: Bipolar.

 

Si hay algo muy suyo es la versatilidad de su música en cuanto a los géneros musicales...
Soy un artista y cantante pop y este género se puede fusionar con todo tipo de ritmos, es como una cartulina en blanco que pintas de todas las formas que quieras. Lo he 
fusionado con música urbana, romántica, bailable, funk y rock, y eso es mi música y mi esencia como artista. Eso mismo hago con mis videos. No creo que haya que limitarse a un estilo específico. Y Bipolar es eso: una experimentación artística, personal y musical con diferentes géneros, estilos y colores.

 

Habléme un poco de ese álbum.

Bipolar es el resultado de estos años que he tenido de experimen- tación desde que me diagnosticaron bipolaridad. Ahí empecé a escribir y a producir un montón de canciones, trabajándolas con diferentes productores en España y Estados Unidos. Me tomé la libertad de hacer canciones de funk y rock, así como covers y canciones inspiradas en un montón de ritmos que siempre me han gustado. Por eso, en él, hay de todo un poco.

 

¿Este álbum es como una guía musicalizada de lo que vive una persona diagnosticada con bipolaridad?
Exactamente. Cuando se da el diagnóstico, uno empieza a entender todas las situaciones del pasado, las contradicciones, las cosas que realmente no te dejaban desarrollar tu potencial al máximo. Y entonces quieres hacer una terapia artística de todo eso. Yo pienso a veces, por ejemplo: “Como ahorita estoy con mis medicamentos, ya me diagnosticaron y ya se qué es lo que pasa, quiero redescubrirme y hacerme amigo de ese Andrés”. Es decir, quieres saber exactamente cómo eres en realidad. Recuerdo que 
en el pasado hice un montón de canciones y cosas que me decían los productores: “Haz esto porque es lo que va a funcionar, haz este video, vístete así porque así es como le gusta a las chicas, o ponte el pelo de este largo porque así es como debe ser”. Y todo eso, aunque me debía estar funcionando, no correspondía a lo que era yo en absoluto. Justamente, el redescubrimiento y el proceso de experimentación para saber quién quería ser como artista es este álbum.

 

¿En algún momento pensó en abandonar su carrera después de saber lo que estaba pasando con su salud mental?
Jamás. Ni siquiera en el momento más difícil que fue cuando estuve en el psiquiátrico y me diagnosticaron. Todo lo contrario. En ese momento fue cuando más música quise hacer y reiteré que esta es mi misión, que no lo estoy haciendo por hobbie, para pasarla bien o para salir en la televisión, sino que es una necesidad que tengo por dentro, un llamado del universo. La música ha sido la constante en mi vida desde siempre, ha sido la psicóloga, la psiquiatra, la terapia, la vida, la madre, ha sido todo. Yo sé que suena como en las películas, pero así es. Y es una película maravillosa, una relación extraordinaria: ella nunca me va a abandonar, entonces yo nunca la abandonaré a ella.

 

Hablando de ese diagnóstico, usted ha dicho que su vida tomó sentido a partir de ese momento. ¿Por qué?
Porque me di cuenta que no era víctima de nada, que no estaba aquí para sufrir, para ponerme a llorar o lamentarme de lo que me pasó. Por el contrario, lo utilicé de una manera extremadamente positiva y lo sigo utilizando todos los días en mi crecimiento como persona. Soy un hombre diferente, un cantante diferente, un compositor diferente, un artista diferente, un hijo diferente, un amigo diferente, soy mucho más completo, soy yo realmente. Ya no ando perdido por 
el mundo buscando la dirección de cómo llegar a mi casa —metafóricamente, por supuesto—. A las situaciones, por más difíciles que sean, hay que buscarles siempre el lado positivo, no nos podemos quedar metidos en el hueco, sino entender lo que el universo nos quiere decir, identificar lo que tenemos por aprender. La bipolaridad me ha hablado y estoy muy agradecido también conmigo mismo de ver las cosas como las veo ahora.

 

¿Por qué tomó la decisión de vincular su carrera musical con la bipolaridad?
Primero, porque como artista y cantante uno exprime constantemente sus sentimientos y qué más honesto de mi parte que contarlo que me ha sucedido y lo que estoy viviendo. Y segundo, porque a la gente le da pena y miedo preguntar cosas sobre temas como estos. Estamos acostumbrados a ver matanzas en la televisión pero seguimos teniendo como tabú temas como la bipolaridad. La bipolaridad me despertó, en un sentido metafórico, y yo quiero despertar a las personas. Quiero utilizar mi exposición, mi carrera, mi música y mis canciones para llevar un mensaje: hay que pedir ayuda y escuchar a los demás. Estamos para apoyarnos y ayudarnos, y ojalá que lo que yo estoy haciendo ayude un ‘tris’ en algo.

 

¿Qué viene para Andrés en lo que queda de 2021?
Después de Bipolar viene un tour por diferentes ciudades de Colombia y también vamos a ir a Ecuador y México a presentar el álbum. Después viene La Cura, un show que estamos montando con diferentes duetos y participaciones y que es la continuación de Bipolar. También vienen lanzamientos de diferentes canciones del álbum en televisión y en plataformas, y nuevos sencillos de La Cura. Uno se llama La Apuesta, lo hice en París con lobos, búhos y cuervos. En fin: cada día me siento más joven y con más ideas. Como un recién nacido, pero que ya viene con experiencia. 


Artículo publicado en la edición impresa de mayo de 2021.