Foto: IStock.
Foto: IStock.
27 de Noviembre de 2022
Por:
Mario Alcalá

Las calificaciones en esas páginas de internet son útiles pero condicionantes para el espectador.

TAGS: Cine

¿Los portales de crítica son confiables?

Hace un par de décadas, cuando no existían los portales encargados de recoger los comentarios de espectadores y críticos sobre las películas, el único faro para el público indeciso frente a la cartelera eran las famosas estrellas del periódico El Tiempo: cinco para las producciones excepcionales y muy rara vez una sola estrella, otorgada a algún largometraje de discutible calidad.

Con la masificación del contenido en la web, ese lugar lo ocuparon otros referentes. Y estos no solo están sujetos a la opinión de un solo crítico, sino que, por el contrario, agrupan a varios y de diferentes nacionalidades, así como de diversos medios. El resultado es una evaluación más democrática, si se quiere, sobre una obra cinematográfica.

Sobresalen los portales Rotten Tomatoes, IMDB, Metacritic y Filmaffinity. Y es tanto su poder que una de sus calificaciones puede significar el éxito o el fracaso de una película en ingresos de taquilla. Rotten Tomatoes, por ejemplo, lanzado en 1998, tiene una no despreciable cifra de 26 millones de visitantes mensuales, 14 de ellos en los Estados Unidos, y recopila las visiones de miembros certificados de varias asociaciones de guionistas y críticos, emitiendo dos tipos de calificaciones: una a cargo de los profesionales de la industria y otra proveniente de los fanáticos suscritos al portal. Al final, una producción recibe la calificación de ‘frescura’ si sobrepasa un porcentaje, o termina ‘pudriéndose’, muy acorde con el nombre del sitio web (Tomates podridos).

Metacritic, que también incursiona en los videojuegos y los libros, basa sus calificaciones en un compilado de apreciaciones de otros sitios web, así como de miles de usuarios. En su veredicto, el verde es lo mejor, el amarillo es regular y el rojo es desastroso. IMDB, por su parte, es la base de datos más grande del mundo del entretenimiento y abarca todo el espectro audiovisual, agrupando a todos los implicados en el proceso de producción. Recibe más de 100 millones de visitas al mes y usa un clásico sistema de puntuación de una a diez estrellas. Finalmente está Filmaffinity, un sitio web en español que también puntúa de uno a diez y que publica tanto reseñas de usuarios como de los más importantes medios: The New York Post, The Guardian y The Hollywood Reporter, entre otros.

Ninguno de ellos tendrá la última palabra y, de hecho, sobre estos sitios se ciernen algunos cuestionamientos. Por ejemplo, Rotten Tomatoes se vio envuelto en una polémica por su complacencia a la hora de calificar las producciones de Disney, mientras era implacable con las cintas ajenas al gigante del entretenimiento. IMDB, por su parte, ha sido vulnerable a usuarios falsos que inclinan valoraciones positivas, y Filmaffinity se muestra fuerte en el público hispanoparlante, pero fallece frente a los gigantes de Hollywood. ¿Y Metacritic? Quizá es el más confiable, pero tampoco infalible, sobre todo cuando se trata de gustos personales. La invitación, entonces, es a no dejarse llevar por uno solo de estos portales y a hacer el sano ejercicio de contrastar cada una de las calificaciones. En todo caso, las estrellas que más importan son las que pone, para sí mismo, cada espectador.