05 de octubre del 2024
Foto: Louis Hansel en Unsplash
Foto: Louis Hansel en Unsplash
5 de Septiembre de 2024
Por:
Diego Montoya Chica. IG: @chinocarajooo

Las siete claves de un bar de Whisky

 

Entre más características se puedan chulear en la siguiente lista con respecto a un bar especializado en whisky, la experiencia será mejor en el establecimiento. Ojo: se trata de mis expectativas personales. Y de hecho, es posible que no exista ningún lugar que cumpla con todo ello. No importa: entre más, mejor.

 

 

 

 

 

 

1. Que el servicio honre la experiencia organoléptica del cliente. Esta es una característica ‘sombrilla’ que engloba algunas de las siguientes.

2. Que el bar tenga a su disposición una gama relativamente amplia de líquidos como para poder comparar regiones o perfiles aromáticos. Ojalá dichas opciones estén clasificadas según geografía o perfil, pero que el orden sea claro en una lista —¡impresa, por favor!—.

3. Que allí se sirva el trago en vasos apropiados, sean Glencairns o cualquier otro en forma de bulbo. Asimismo, que exista la posibilidad de tener agua en gotero o cuchara para diluir a gusto la bebida. 

4. Que la atmósfera visual y auditiva sea agradable, independientemente del estilo. Esto es subjetivo, claro está: para mí, debe ser un poco calmada como para poder concentrarse en la bebida —imposible en un concierto de rock—, pero nunca demasiado como para aburrirse: algo de alegría de bar debe haber porque, si no, mejor tomar en casa. ¿Tiene que parecer un pub británico? De ninguna manera. ¿Los parlantes deben tocar música celta o rock anglo? No necesariamente. En suma: no debe parecer un bar temático, salvo que se trate los precursores: The Pot Still, en Glasgow, es una suerte de modelo origen. Pero aquellos que se distancian del cliché me parecen refrescantes.

 

5. Que haya pedagogía: algo de guía para saber qué se está tomando uno y cómo sacarle mejor provecho. Esto es extremadamente raro, pero alguna vez sí que me entregaron un trago con una rueda de aromas para guiarme.

 

6. Que ofrezcan tragos completos (de 50 ml aprox.)  y medios tragos (25 ml aprox.). Los segundos permiten gastar menos dinero y probar más perfiles antes de sentir el alicoramiento.

7. Y finalmente, otro capricho personal: 1ue no sea un lugar antipático: Que, si fuera el caso, se pueda entrar en camiseta y en tenis de manera que la gente se sienta socialmente relajada. No soy fanático de los lugares con delirio de club social. Los hay muy bonitos y todo, pero los veo como carnadas para cierta inseguridad de clase. En Escocia, de donde es el scotch, los mejores establecimientos son pubs de esquina, con gente de diversos ingresos y uno que otro borracho. 

 

 

 

 

 

El último que visité fue L’Ile Noire, en Montreal, y cumplió con seis de mis siete aspiraciones. Pero lo más importante es: ¿será que algún día habrá uno en Colombia? Lo más cercano que conozco es el bar 8 y cuarto, de Bogotá.