Entrenador personal: un aliado para la salud

*Artículo publicado en la edición impresa de enero del 2023

CADA AÑO empieza con nuevos propósitos: viajar, aprender un idioma, mejorar la alimentación y retomar o empezar a hacer ejercicio. La actividad física es ese objetivo que siempre se tiene en la lista, pero que no todos logran cumplir.  De acuerdo con un informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS) publicado en 2022, 81 % de los adolescentes y 27,5 % de los adultos no alcanzan los niveles de actividad física recomendados. En el caso de Colombia, según el Ministerio del Deporte, solo 8 % de los niños en todo el país practica deporte fuera del colegio: un porcentaje muy bajo en comparación con países como Reino Unido, donde la cifra es de 48 %.  Para la OMS, la falta de actividad física en los jóvenes será perjudicial, pues en los próximos 10 años podrían aumentar considerablemente los diagnósticos de hipertensión, diabetes o enfermedades mentales como la ansiedad y la depresión.  Más que por el deseo estético de lucir bien y tener el cuerpo soñado, el ejercicio está vinculado con la salud y los aliados de este proceso son, entre otros, los entrenadores personales. Por eso, si dentro de sus planes está empezar una práctica constante este 2023, acá le compartimos algunas razones, beneficios y consejos para elegir a la persona indicada.

Es fundamental no creer todo lo que se dice y promueve en redes sociales

¿PARA QUÉ SIRVE TENER A UN ALIADO? 

Un entrenador personal (o personal trainer) es un o una profesional que se encarga de planificar y supervisar un entrenamiento deportivo o una actividad física.  “Ya sea en el gimnasio o de forma particular, es importante elegir a esta persona, ya que tienes a la mano a alguien que te guía, enseña y diseña una rutina exclusivamente para ti. Lo valioso es que no es algo genérico”, explica Luisa Fernanda Aguirre, profesional en Cultura Física y Deporte y entrenadora personal desde hace cuatro años. 

El o la instructora realiza el cronograma de ejercicios, en algunos casos elabora una dieta o plan de alimentación y brinda herramientas para mejorar hábitos y comportamientos cotidianos para alcanzar los objetivos propuestos. Tener un entrenador o entrenadora implica concretar ciertas metas para la salud corporal y mental. “El trabajo está basado en los propósitos que se establecen con el cliente. Además, se revisa si tiene alguna patología o enfermedad”, asegura Luisa Aguirre y añade: “Es un equilibrio entre lo interno y externo”. Para Edwin Pardo, entrenador personal y deportivo con énfasis en fisioterapia, “el preparador te guiará para la correcta ejecución de tu entrenamiento y dará un efectivo planteamiento nutricional. A parte de ser tu guía motivacional, es la persona que te dejará en la zona que deseas”. 

Debe haber confianza con el usuario, así como un ambiente seguro. Foto: IStock. 

GUÍA VIRTUAL: ¿TODOS PUEDEN SER ENTRENADORES?

Las redes sociales están llenas de títulos como “Bajé de peso en 10 días”, “Con esta rutina logré las nalgas que quería”, “¿Quieren más músculos? Apliquen estos consejos”. Estos contenidos pretenden mostrar que, por arte de magia, se puede lograr el cuerpo “perfecto” y aunque caer en estos videos o artículos es muy fácil, puede ser perjudicial para la salud.  “Quizá por inocencia o necesidad, muchas personas cometen el error de seguir estas rutinas, que no están diseñadas para ellas, sin ser conscientes de que pueden generar una lesión por no ejecutar bien el movimiento que se está haciendo”, explica Aguirre. Esta profesional comparte que, durante la pandemia, conoció a diferentes personas que por hacer ejercicio con rutinas de influencers resultaron con problemas de rodilla o columna. “Las personas del común no tienen el acondicionamiento físico ni el mismo estado de salud de quienes se dedican a esto, por eso puede ser nocivo”, asegura.  Para la entrenadora, hay que tener mucho cuidado tanto con lo que se recomienda a los seguidores como con aquello que se consume. “Además, puede que esa rutina no esté basada en mis objetivos. Por ejemplo, yo quiero aumentar mi masa muscular y los ejercicios del video se enfocan en bajar la grasa. De allí nace la frustración por no ver el resultado en el ejercicio y por eso, muchas veces las personas desisten”.

"Hay que conocer previamente el estado de salud de la persona"

ENTRENAR CON SEGURIDAD 

Además de mejorar el estado físico, respirar mejor y, por qué no, medir nuestra resistencia, tener un entrenador guía tiene otros beneficios. Estos son algunos de ellos: 

Tener rutinas exclusivas: “Nosotros tenemos la capacidad de diseñar rutinas específicas para cada usuario, según el objetivo de cada persona”, asegura Luisa Aguirre. 

Ayuda a la mano: Nada como tener una persona que guíe la rutina y solucionar dudas fácilmente. “El entrenador te explica para qué sirve cada ejercicio, qué músculos trabajar, cómo aumentar la intensidad y cómo ejecutar una buena técnica de movimiento”, añade la especialista. Edwin Pardo, por su parte, asegura que uno de los beneficios es “aprender a conocer tu cuerpo para ejecutar cualquier actividad que realices y para entrenar de la mejor manera”.

Monitoreo diario, semanal o mensual: El o la entrenadora toma medidas durante un periodo de tiempo para saber qué tanto se ha avanzado en el proceso. Esto sirve para evaluar la rutina de ejercicios o realizar los cambios necesarios para cumplir las necesidades del cliente.

Entrenar a su tiempo: Por lo general, los entrenadores personales trabajan a domicilio, a menos que se pague una membresía en un gimnasio. Esto permite que la persona pueda entrenar en su casa o cerca de ella. “Nosotros nos desplazamos a donde la persona requiera el servicio y eso también ayuda a motivarlos. La pereza ya no es una excusa, le das disciplina, motivación y facilitas el tiempo de las personas”, añade Aguirre. 

¿QUIÉN SÍ Y QUIÉN NO? 

Elegir un entrenador personal no es tarea fácil y, como todo en la vida, requiere de prueba y error. Sin embargo, hay ciertas características que son importantes a la hora de escoger a esta persona, pues el ámbito profesional es clave para no cometer errores. “Lo más importante es guiarse por un experto que haya estudiado, que esté certificado en entrenamiento personal o que haya hecho alguna carrera técnica o profesional. Es decir: personas que tengan estudios sobre el tema”, dice la especialista.  Si bien hay entrenadores empíricos que se han dedicado al ejercicio, hacen rutinas diarias, las comparten y decidieron empezar a prestar sus servicios, hay que ser precavidos y analizar antes de tomar cualquier decisión. 

Para Pardo, además del conocimiento profesional, es importante que el o la entrenadora tenga disciplina; que sea puntual, tenga buena actitud y motive más que criticar. En esto coinciden ambos expertos, ya que la actitud del profesional no puede ser violenta. Al contrario: mientras más empatía se tenga, los resultados del cliente mejoran. 

Para Luisa, otro punto importante es no dejarse guiar por la contextura del entrenador o la entrenadora: “Acá no importa si es si tiene más o menos músculos, eso no nos dice nada. Además, cada persona tiene sus gustos. Por ejemplo, hay mujeres que se sienten mejor con otras mujeres, lo importante es que haya confianza y conexión con el usuario, así como crear un ambiente seguro”. Sea en su casa o en un gimnasio, lo clave es que no abandone sus propósitos de año nuevo, de la mano de un entrenador personal. Recuerde que su salud y bienestar es una de las cosas más importantes para tener calidad de vida.

TIPS PARA ELEGIR UNA BUENA RUTINA DE EJERCICIO 

Chequeo médico: puede que la persona sufra de colesterol o triglicéridos, que tenga algún problema de corazón o alguna lesión osteomuscular. Por eso, para poder elegir una efectiva rutina de ejercicio hay que conocer previamente el estado de salud en el que se encuentra cada persona.

Asesoría de un profesional: no todas las personas que han hecho ejercicio durante años pueden determinar qué sirve, pues posiblemente las rutinas les han servido a ellos pero lo pueden perjudicar a usted. Hay que preguntarle a personas expertas y profesionales cuál debe ser el paso a paso para lograr los objetivos. 

No creer en mitos: no crean en todo lo que dicen las redes o los influencers. Recuerden que la alimentación y la actividad física van de la mano, así que sin la una o la otra no se puede lograr con satisfacción las metas trazadas. No se deje llevar si su amiga o vecino tienen resultados más rápido: cada cuerpo y cada proceso es diferente. 

Tener paciencia y disciplina: hacer cualquier actividad física requiere de mucha disciplina, de constancia. Así que no pretenda que los resultados se van a obtener de un día para otro. Muchas personas no ven los frutos en un mes, por eso se desmotivan y desisten, así que se debe tener paciencia y disciplina.