LA GRAN GUERRA EN LA PRENSA COLOMBIANA

El cable aéreo y el cable submarino, las nuevas tecnologías del momento, permitieron a los habitantes de Colombia conocer los hechos con uno o dos días de retraso en los periódicos nacionales:

”… Se oculta la desgracia al anciano emperador Francisco José por temor de que pueda tener fatales consecuencias…” (Viena, 30 de junio de 1914. El Tiempo).

“El káiser apenadísimo por el asesinato del archiduque Fernando y su esposa, ordenó enlutar la Escuadra alemana y aplazar las regatas en preparación” (Viena 1° de julio de 1914. El Espectador).

“Ha causado profunda sensación el asesinato del archiduque Francisco Fernando”. 

Hubo también, grandes titulares que luego resultaron falsos, como este:

“A última hora sábese que el emperador de Austria, Francisco José, ha sido asesinado” (Nueva York, 4 de agosto de 1914. El Espectador). 

Las representaciones diplomáticas fueron fuentes de información muy activas. 

“La legación de Francia informa a todos los franceses residentes en Colombia, que se ha dictado una orden general de movilización para el primer domingo dos de agosto… El encargado de negocios hace un llamamiento al patriotismo de sus compatriotas para que partan a incorporarse en sus respectivos Cuerpos”. El Tiempo, 3 de agosto).

A un mes del asesinato de Sarajevo, aparecen los primeros editoriales:

“Maldigamos de la guerra, anatematicémosla, escarnezcámosla, cubrámosla de befa, de oprobio y de salivas” (El Espectador).

“La frase belicosa del káiser sintetizó magníficamente el estado de Europa: ‘es preciso tener siempre la pólvora seca y el sable afilado’” (El Tiempo).

Paulatinamente se institucionalizan secciones sobre la guerra, que dan cuenta del día tras día, a veces contradictorio. 

“Los franceses en Alsacia”. “París desbordante de entusiasmo”.    

“Corre el rumor de que los alemanes penetraron en Francia”. 

“Otra vez Waterloo. Desastre mundial”.

El Tiempo el 25 de agosto de 1914 relata: 

Un francés se indigna con las noticias de Gaceta. “El señor Gastón Lelarge, conocido arquitecto francés tuvo anoche un acceso de indignación al leer en los tableros de Gaceta la noticia de que los franceses habían sido vencidos en Bélgica… Al escándalo que se formó salió el señor director de Gaceta, don Luis Cano, y tuvo un fuerte altercado con el señor Lelarge que fue conducido a la central”.