Desde el foso

A fines de agosto la convención del Partido Republicano confirmó a Mitt Romney como candidato presidencial. Él será quien ocupe la Casa Blanca en los próximos cuatro años si logra derrotar al actual presidente, Barack Obama. Se trata de un candidato al estilo de los conservadores gringos: blanco, elegante, exitoso empresario, hombre sumamente rico y casado con mujer rubia.

Nadie que haya sido adolescente podrá olvidar la escena de El graduado que consagró las medias femeninas como eterno objeto erótico. Allí, al fondo, aparece el estudiante Benjamin Braddok (Dustin Hoffman) hipnotizado por las piernas de la señora Robinson (Ann Bancroft), progenitora de la que luego iba a ser novia; en el cuarto del motel, la protosuegra, sentada en la cama y doblada la rodilla, se pone lentamente las medias que cubren sus perturbadoras extremidades inferiores. Es una imagen inmortal.

La lengua española es nieta del latín y el romance, a los que debe la mayor parte de su léxico y su estructura. Pero a lo largo de la historia han participado en su desarrollo otros idiomas. Unas pocas palabras son de origen desconocido, como perro, al que el etimologista español Joan Corominas atribuye un poco convincente origen “de creación expresiva”, a partir de la manera como los pastores llaman a su perro: ‘brrr’ o ‘prrr’.