Virgin Galactic
23 de Agosto de 2017
Por:
Mauricio Romero

Comunidades extraterrestres, recolección de basura, viajes turísticos, cementerios y hasta internet espacial son algunas de las ideas con las que el hombre busca demostrar que el cielo no es el límite.

Ideas galácticas

 

La posibilidad de que en el futuro la Tierra le quede pequeña a la humanidad ha centrado, según varios científicos, a la carrera espacial en la búsqueda de planetas habitables. Y es que, al fin de cuentas, la única manera de saber si existen o no otros mundos es buscándolos. Por eso, después del fin de la Guerra Fría, cuando la competencia por la conquista espacial era protagonizada por Estados Unidos y la Unión Soviética, los científicos optaron por aceptar que la exploración del cosmos tenía que ser un trabajo universal.

De allí que ahora sea posible encontrar proyectos de países como Francia, Corea del Sur, Gran Bretaña, China y Japón, e incluso iniciativas de la empresa privada, en cabeza de Richard Branson, fundador de Virgin Group, y Elon Musk, presidente del fabricante de autos eléctricos Tesla.

Estos son algunos de los esfuerzos que se adelantan en la actualidad, y para cuya concepción no se tuvo en cuenta qué tan fantásticos o irrealizables pueden ser, precisamente, para no poner límites a la imaginación y conseguir llegar al planeta más cercano con posibilidades de ser habitable: Próxima B, a 17.157 años de viaje con la tecnología actual.

 

Viajes turísticos a la estratosfera

El magnate británico Richard Branson asegura que, a finales de este año, despegará el primer vuelo de prueba de Virgin Galactic, una iniciativa que, por 250.000 dólares el tiquete, planea llevar pasajeros a vivir una corta experiencia por fuera de la atmósfera, en la que se puede experimentar la ingravidez.

El empresario asegura que él y su familia abordarán un vuelo de Virgin a principios del año entrante, con una nave que se parece a un avión, pero que tiene la capacidad de salir de la atmósfera, y que a finales de 2018 debería estar operando comercialmente.

 

Más cohetes, menos costos

El proyecto Alasa trabaja en construir un avión que pueda llevar un cohete a cuestas para después lanzarlo. Esto reduciría costos y permitiría realizar lanzamientos en cualquier momento, sin depender del estado del clima, que suele afectar a las misiones que salen desde bases en el suelo.

 

Red de limpieza

La Agencia Japonesa de Exploración Aeroespacial (Jaxa) implementa una red gigante para atrapar la basura espacial que orbita el planeta, y que representa graves riesgos para los satélites, las naves espaciales y la estación internacional, pues estos desechos son como proyectiles que viajan a miles de kilómetros por hora.

Los científicos estiman que en la actualidad hay unos 10 objetos de gran tamaño que giran alrededor de la Tierra y que son los más urgentes de atrapar, pero hay por lo menos 30.000 desperdicios de más de 10 cm de diámetro que también son peligrosos.

 

Fábricas de impresión 3-D

SpiderFab es una iniciativa para que robots gigantes en forma de araña ─que en realidad son impresoras 3-D─ fabriquen objetos y dispositivos en el espacio, pues es más práctico, liviano y barato enviar materias primas que productos terminados.

 

Cementerio estelar

Elysium Space les ofrece a sus clientes la posibilidad de poner las cenizas de una persona fallecida a orbitar la Tierra, un servicio conocido como “Shooting Star Memorial”. En palabras de la compañía: “¿Para qué mirar al suelo si quieres recordar a tu ser querido, si lo puedes ver en cualquier lugar y a cualquier hora con solo levantar los ojos al cielo?

 

También ofrece el ‘Lunar Memorial’, en el que una parte de las cenizas es enviada a la superficie lunar. La compañía asegura que las cenizas, que girarán alrededor del planeta, se llevarán en la nave SpaceX Falcon 9, que emprende la misión Star II, mientras que las de la Luna viajarán en la misión Astrobotic. Aún no hay fecha para ninguno de los lanzamientos.

 

Misión tripulada a Marte

Más de 200.000 aspirantes de 140 países aplicaron para tan solo cuatro cupos en un vuelo de siete meses y sin retorno al planeta rojo, que despegaría en el año 2022.

La iniciativa está en cabeza de Paul Romer, actual vicepresidente del Banco Mundial, y la idea es que las dos parejas que viajen se establezcan en Marte, para alistar el hogar de futuras generaciones. Quienes viajen dejarán atrás a sus seres queridos “por el bien de la humanidad” y se encargarán de sembrar alimentos y preparar ambientes habitables.

 

Transporte de materiales en un avión espacial

Skylon es un proyecto británico para construir un avión de carga que vaya directamente a las estaciones espaciales con material de construcción, equipos y alimentos. Tan solo se demora 15 minutos en salir de la atmósfera y puede realizar varios viajes sin complicaciones.

Los primeros vuelos de prueba comenzarán en el 2019, y se estima que la nave no tripulada alcanzará velocidades de hasta 30.000 kph.

 

De regreso a Venus

A principios de la década de los ochenta, el entonces gobierno soviético envío algunas sondas a Venus, el segundo planeta más cercano al Sol y de un tamaño muy similar al de la Tierra.

Ahora los rusos planean seguir su exploración mediante vehículos que puedan posarse en su superficie, más varios globos sonda que sobrevuelen los cielos del planeta.

 

Cohete sin límite de velocidad y autonomía

El Bussard Ramjet, concepto inventado por el fallecido Dr. Robert Bussard, en teoría recolectará moléculas de hidrógeno en el espacio mediante potentes imanes, cuyos motores lo propulsarán a velocidades increíbles (incluso más rápido que la de la luz) y podrá viajar de forma ilimitada, pues genera su propio combustible. Será especial para viajes intergalácticos.

 

Ascensor al espacio

Los japoneses trabajan en la idea de construir una estructura con una altura que le permita salir de la atmósfera, con el fin de llevar y traer personas y material. Está planeado para el 2050, y recuerda al edificio que propone una firma de arquitectos, que estaría colgado de un asteroide que orbita en forma de 8 por el continente americano.

 

Internet desde el espacio

Mediante una gigantesca antena en un satélite alrededor del planeta, Elon Musk planea llevar acceso a internet de alta velocidad desde allí, con una cobertura casi que total del globo terráqueo, de una manera más económica. Habrá que ver qué dicen los operadores, que seguramente no querrán que se les acabe el negocio. El proyecto, que se conoce como SpaceX, le ha valido a Musk que lo comparen con uno de los villanos de las cintas de James Bond.

 

 

*Publicado en la edición impresa de julio de 2017.