20 de Octubre de 2018
Por:
Redacción Credencial

A partir del sábado 20 de octubre se abrieron las puertas de cuatro salas de exposición en el Claustro de San Agustín para mostrar, a través de más de 500 fotografías, el retrato fotográfico que Jesús Abad Colorado ha hecho del conflicto en Colombia.

'EL TESTIGO' DE UNA TIERRA CALLADA

A través del lente de su cámara, el reportero gráfico y periodista Jesús Abad Colorado se ha encargado de contar la historia del conflicto de nuestro país desde la óptica de los “perdedores”, como él mismo los llama. Se refiere a esas personas que se acostumbraron a perder: perder a sus familias, perder sus tierras, su comida y hasta perder sus animales. Las mismas que lo único que aún no han perdido es la esperanza.

 

“La verdad que se le quiere contar al país es siempre la de los vencedores, no la de los perdedores, la población vulnerada en toda su dignidad humana –sostiene Abad–. La verdad desde la cual yo trato de acercarme es la de las víctimas, esas personas que han estado perdiendo constantemente y que están cansadas pero que, en muchos casos, buscan regresar a su tierra para reconstruir sus vidas y vuelven a sembrar en lugares donde muchas veces recogieron sus muertos”.

 

En la guerra, muchas familias han tenido que desplazarse más de tres veces de sus tierras. Y en medio de esas movilizaciones hay historias que nadie ve ni cuenta: las de sus pies, sus electrodomésticos, juguetes, animales, plantas. Esas historias se cuentan en ‘El Testigo’, que no solo es una exposición fotográfica sino también una recopilación en texto de todo el trabajo de Abad en términos investigativos.

 

La exposición implicó dos intensos meses de curaduría –a cargo de María Belén Sáez de Ibarra–, así como de edición de textos, montaje y todo el trabajo que esto conlleva. Se dispusieron cuatro salas para la misma, que se dividen en Desplazamiento, Resistencia, Desaparecidos y Conflicto en zonas como Bojayá, Mapiripán y el Oriente antioqueño.  

 

El estilo de periodismo de Jesús es comprometido con las víctimas. Cada fotografía tiene caras y nombres para identificar a cada individuo. Él no solo las retrata, sino que, además, regresa a donde las retrató para saber qué ha pasado con ellas. Por eso, la curadora María Belén Sáez de Ibarra, asegura que al hacer la curaduría “uno no está inventando nada. Solo está entendiendo la mente y el corazón de Jesús Abad y acompañándolo para contar la complejidad del relato de su vida”.

 

La muestra estará disponible hasta Diciembre en el Claustro de San Agustín, Cra 8 No. 7 -21, Bogotá. De martes a domingo 10:00am a 5:00pm con entrada libre.