Archivo Particular
27 de Julio de 2017
Por:
Mauricio Romero

Jeff Bezos, fundador de Amazon, se convirtió en el hombre más rico del mundo arrebatándole el trono a Bill Gates, según datos de Forbes y Bloomberg. A propósito, recordamos cómo funciona Amazon Go, la tienda de abarrotes de alta tecnología en la que se compra sin necesidad de pasar por la caja registradora.

Toma tu producto y vete

Un comercial de la tecnológica IBM de 2006 describía lo que sería la tienda de ladrillo y cemento del futuro: un hombre con aspecto ‘sospechoso’ que viste un gran abrigo entra a un almacén y comienza a tomar productos de los estantes, los cuales esconde en los bolsillos de su chaqueta, mientras mira a todos lados.

Sin importar que las cámaras de seguridad lo estén grabando, o que los demás clientes lo miren, el hombre continúa en su actividad. Luego, se aprecia a un guardia que persigue al extraño visitante, que en ese momento ya está saliendo del establecimiento.

Luego del pitido que hace la puerta de seguridad al detectar la salida del hombre de la gabardina, el guardia le grita: “¡Señor!”. Este voltea, y el vigilante, con cara amable, le dice: “Olvidó su recibo”. Todo lo que el supuesto maleante llevaba en su abrigo ya había sido descargado de su tarjeta de crédito mediante un sistema de compra perfectamente lícita, solo que sin filas ni demoras.

La única diferencia entre dicho anuncio, el cual se puede ver en YouTube si hace la búsqueda por ‘IMB RFID Commercial’, y la realidad actual de la tienda Amazon Go es que el establecimiento no le emite un recibo de compra en papel. Todo queda en una aplicación en el teléfono y la cuenta es cargada a la tarjeta de crédito.

La visión de IBM giraba alrededor de la tecnología RFID (sigla en inglés de Radio Frequency Identification), es decir que los productos tenían un chip RFID incorporado que era leído en el momento de salir del establecimiento. Por ello el ruido que hace la puerta cuando el hombre del comercial sale del supermercado.

¿Cómo funciona?

Increíblemente, luego de dominar  el mercado online, Amazon decidió conquistar el mundo real con sus tiendas Amazon Go, que se especializan en abarrotes y víveres, lo único en lo que el gigante no es líder (sí lo es en venta de ropa, accesorios, tecnología, música, etc.).

La idea es abrir unas 600 tiendas en Estados Unidos durante 2017; por ahora, las pruebas están a cargo de los mismos empleados de la compañía Amazon, quienes cuentan con un establecimiento dentro de su sede de trabajo en la ciudad de Seattle, Washington, Estados Unidos.

Estas son tiendas de conveniencia o supermercados pequeños en donde la gente puede hacer un mercado grande o hacer compras de afán, y en ninguno de los casos es necesario hacer filas o interactuar con un dependiente.

El sistema funciona de la siguiente forma: el usuario baja a su teléfono móvil la aplicación Amazon Go. Cuando ingresa a la tienda, pasa el código de barras en su pantalla por un lector que, a su vez, permite el acceso del cliente a través de una registradora.

Una vez dentro de la tienda, el cliente toma lo que quiera y sale del almacén. Lo que compre se le carga automáticamente a su tarjeta de crédito adscrita a Amazon Go.

Pero es lo que hay detrás de la simple toma de productos del estante lo que llama la atención, y es que el sistema lo conforma un complicado conjunto de sensores y “aprendizaje de máquina” –o aprendizaje profundo– que registra lo que la persona echa en el carro de compras, e incluso lo que devuelve al estante, en caso de que cambie de parecer.

Todo es cargado a la cuenta final apenas el cliente sale del supermercado. Cero filas, cero espera, cero interacción con humanos, lo cual expertos como el profesor del IE Business School, Enrique Dans, proyectan como uno de los riesgos de este tipo de tecnologías, en cuanto a “la naturaleza del empleo y la sustitución hombre-máquina”.

Dans publica en su sitio web (www.enriquedans.com) que este tipo de tecnología avanza a pasos agigantados y obligará a un reacomodamiento de las funciones de los empleados de supermercados, un sector que, según el experto, emplea a 3,5 millones de personas en Estados Unidos, con un salario aproximado de 19.000 dólares al año.

 

Amazon Go, en pocas palabras

Tecnología: visión por computador, mediante suficientes cámaras de video en los almacenes, sensores de todo tipo, aprendizaje de máquina. También incluye, como predijo IBM, tecnología de RFID. Hay manejo de Big Data, que permite conocer mejor al cliente y ofrecerle lo que le podría gustar. Se necesita un teléfono móvil, una tarjeta de crédito y la ‘app’ gratuita de Amazon Go.

Las tiendas: serán establecimientos de unos 600 metros cuadrados y venderán básicamente víveres, pero incluso en eso han puesto atención, pues los clientes encontrarán pan fresco, chocolates y quesos artesanales, para hacer de la experiencia una más gourmet.

Versión ‘beta’: por ahora, Amazon Go tiene una sola tienda que funciona “a puerta cerrada”; es decir, solo para los empleados de Amazon en Seattle, pero a principios de 2017 comenzará a abrir locales al público en todo Estados Unidos.

 

 

*Publicado en la edición impresa de enero de 2017.