Foto cortesía LG
Foto cortesía LG
11 de Marzo de 2015
Por:
Mauricio Romero

Nevera habla con huevos, lavadora llama detergente y televisor hace lista al supermercado.

Internet de las cosas, la nueva ‘revolución industrial’

Un vehículo atropella a una persona, el carro que lo embistió llama una ambulancia antes de que el conductor lo haga mientras que, al llegar, la ambulancia ya tiene la historia médica del peatón arrollado. Una vez en el lugar de los hechos, los paramédicos obtienen la condición de salud actual del paciente mediante información recopilada y enviada desde el monitor de pulsera del accidentado, de tal forma que cuando la persona llega al hospital, los equipos, los medicamentos y los especialistas para este caso ya están listos, lo que ahorra tiempo y salva vidas.
La descripción anterior no pertenece a una historia de ciencia ficción, sino que es un ejemplo de una de las miles de aplicaciones de la tendencia mundial conocida como Internet de las cosas, o IoT, por su sigla en inglés.
Muchos consideran al Internet de las cosas como el próximo gran avance tecnológico (como en su momento fueron la electricidad, la bombilla, la televisión, el computador o Internet), y han llegado a referirse a este como la ‘revolución industrial del siglo XXI’. El IoT significa la posibilidad de que cada vez más aparatos se comuniquen entre sí, incluso sin intervención humana: “Es el próximo gran adelanto tecnológico”, afirma Juan Pablo Consuegra, director de Mercadeo y Operaciones de Negocios de Microsoft Colombia.
Así, el Internet de las cosas consiste en nuevas aplicaciones para una vida diaria más automatizada gracias a avances tecnológicos en cuanto a hardware y software, o sea más chips y procesadores en cualquier aparato y más ‘apps’ para controlarlos.
Empresas como la tecnológica coreana LG le apuestan su futuro al Internet de las cosas mediante iniciativas en innovación, como lo expuso el doctor Scott Ahn, presidente y director de tecnología de LG Electronics, en el discurso inaugural de la más reciente edición de la feria tecnológica CES, que se realizó en Las Vegas en enero pasado.
Ahn dijo que más allá de un conjunto de dispositivos que se comunican entre sí y las aplicaciones para controlarlos, el IoT se trata de “conectar todo lo que valoramos y eso va más allá de las fronteras del hogar, como la oficina, el vehículo o el supermercado”, al tiempo que explicó que uno de los objetivos de su compañía es “maximizar el valor que los clientes obtienen del IoT mediante plataformas, conectividad y un ecosistema de dispositivos que se entiendan entre sí”.
Precisamente, un ejemplo de aplicación de este conjunto de tecnologías es la nevera que puede detectar si no hay leche o huevos. Un sensor se encarga de detectar que tales productos se acabaron o están a punto de acabarse, luego envía una orden al computador principal del refrigerador, el cual se conecta por Internet con el supermercado y ordena el domicilio, con carga a la tarjeta de crédito del usuario y sin intervención humana.
Lo mismo puede suceder a bordo de un carro, en el cual el vehículo hace sonar una alarma cuando transita cerca del supermercado para recordarle al usuario hacer las compras. “Un ejemplo de esto es la sincronización que hace Windows con algunos modelos de vehículos de Ford mediante la aplicación Sync”, comenta Consuegra, de Microsoft Colombia.

Compromiso de las empresas

En la actualidad, varias compañías trabajan con el fin de convertir en realidad un mundo de aparatos interconectados, pero para hacerlo deben trabajar sobre estándares abiertos y no como sucedió con ‘la guerra de formatos’ de video en los ochenta, entre Betamax y VHS, o la lucha que hubo antes de que Blu-ray se impusiera como el estándar de las películas en alta definición.
Para Francisco Reyes, presidente de SAP para la región norte de América Latina, el Internet de las cosas es “la tecnología que conecta personas, máquinas y cosas con el fin de permitir el flujo bidireccional de información y una toma de decisiones en tiempo real”.
Reyes explica que la adopción de tecnología IoT se está acelerando gracias a la reducción en el tamaño y los precios de sensores, una mayor gestión de grandes datos y análisis predictivo, además de la asignación de direcciones de IP (de Internet) únicas para los objetos.

El internet de las cosas va más allá de las tabletas, los teléfonos inteligentesy los computadores. (Foto cortesía SAP)

“La revolución que Internet ha provocado en la cotidianidad de las personas es algo tangible, el contenido en la Red se ha triplicado en los últimos tres años. Internet aloja a los servidores que utilizan las páginas web y los dispositivos a través de los que accedemos a esas páginas. Lo anterior lleva a que, aunque parezca mentira, el espacio empiece a agotarse”, comenta el directivo de SAP.
Sin embargo, para solucionar este obstáculo, el vocero de SAP recuerda que desde mediados del año pasado se viene implementando una nueva versión de Internet (IPv6 o Internet Protocol versión 6) que viene a resolver esta problemática de espacio para que sea posible incorporar no solo los computadores y dispositivos móviles, sino todo tipo de objetos a la Red.
“Cada una de esas ‘cosas’ ahora puede ser reconocida a través de un microprocesador o sensor que identifique su IP y le permita conectarse a Internet”, anota Reyes, quien agrega que mediante este ambiente de interconexión, “diferentes compañías podrán ofrecer a las personas servicios y aplicaciones inteligentes sin precedentes”.
A este respecto Juan Pablo Consuegra, de Microsoft Colombia, opina que “los estándares son cada vez más abiertos” y que para el acceso permanente a Internet se debe utilizar un protocolo que “en líneas generales suministre conectividad y unidad a todos los aparatos allí conectados, independientemente de quién sea el fabricante”.
Consuegra recuerda que la Internet ha tenido la capacidad de “permear los aspectos de nuestra vida”, y explica que por tal razón IoT lleva Internet a otro nivel e incorpora dentro de la Red a otros dispositivos, además de las tabletas, los teléfonos y los computadores.
Por su parte, Francisco Reyes, de SAP, asegura que en el contexto de IoT, la movilidad y ‘la nube’ tendrán un papel fundamental: “Mientras los dispositivos móviles de los consumidores emitirán grandes volúmenes de información, ‘la nube’ será el lugar donde se alojarán”, explica el experto.

Diferentes aplicaciones

El Internet de las cosas implica un mundo de objetos conectados a la Red, desde ciudades inteligentes hasta automóviles u hogares en donde hasta lo más básico podría contar con conexión a Internet.
Poner a funcionar la lavadora desde la oficina, entender por qué camino el tráfico es más ágil esta mañana, alertar al doctor sobre un valor anormal en el estado de un paciente, recibir recetas de cocina con base en los alimentos almacenados en el refrigerador o sugerencias sobre la necesidad de cambiar el colchón teniendo en cuenta cómo dormimos y nuestros registros de salud son algunos de los usos prácticos de esta nueva tendencia.
Además, el Internet de las cosas reúne dos mundos: el de las cosas u objetos y el mundo virtual, lo cual a su vez potencia otros aspectos de la tecnología, como Big Data, que es de valor para el mundo de los negocios por cuanto permite recopilar datos y tomar decisiones con base en el análisis de esa información, para luego influenciar remotamente sobre el dispositivo que reportó determinada conducta o actividad.
Fabricantes de chips y procesadores, como MediaTek, de otro lado, prevén que IoT se está imponiendo con rapidez y por ello ya ofrecen conjuntos de procesadores con diferentes núcleos (cuantos más núcleos, mayor desempeño tiene un procesador) optimizados para contenidos multimedia en televisores tipo Smart TV.
Y, precisamente, la visión de compañías como LG en relación con IoT los tiene trabajando en que sus electrodomésticos se comuniquen entre sí. Es por ello que desde el televisor, un usuario puede monitorear el ciclo de operación de su lavadora o secadora, al tiempo que ve una película y controla el sistema de sonido en otras habitaciones de la vivienda. Y en lugar de control remoto, el usuario puede controlar el TV desde su teléfono celular.

Mejor salud gracias a IoT

Mediante una aplicación en el teléfono o en un smart watch, los médicos pueden conocer el cuadro clínico de sus pacientes y ellos mismos saber cómo está funcionando su cuerpo. Esta es la tendencia de mHealth, de la tecnológica Gemalto, que tomará fuerza gracias al Internet de las cosas.
Alertar a los médicos de cualquier anomalía, tener una atención inmediata en caso de emergencia y enterarse del estado de salud con solo encender el celular, son algunos de los beneficios de mHealth, que en segundos arroja el estado de salud actual del paciente con el respectivo cuadro clínico y les permite a los médicos supervisar las mejoras o anomalías de la enfermedad de manera remota.
Daniel Cuéllar, gerente de ventas para telecomunicaciones de Gemalto, explica que mHealth opera a través de la tecnología de máquina-a-máquina (M2M), la cual “no es más que la transferencia de información entre dos dispositivos. En ese caso, entre un smartphone o un smart watch que tiene incorporada una aplicación determinada, por ejemplo de monitoreo de salud, y diferentes sensores y dispositivos que miden la presión arterial, la glucosa, las escalas de peso y otros indicadores del perfil clínico”.
Otra de las aplicaciones es la televigilancia, que tiene que ver con los sensores que monitorean desde la entidad médica la evolución o inconvenientes que pueda tener un paciente que se encuentra en su casa. Si hay alguna alteración en su estado de salud, inmediatamente los médicos reciben una alerta, que les permite reaccionar de manera oportuna.

 

Internet de las cosas en los negocios

Los pagos electrónicos sin hacer fila. En el almacén, basta con llenar el carritoy salir al parqueadero. la cuenta se carga automáticamente a la tarjeta de crédito.

El IoT permite transformar procesos de negocio para operar de manera más eficiente y reinventa las empresas y la experiencia de los usuarios.

- Conectar la cadena de suministro con una central mediante la integración de datos en tiempo real de carga, contenedores y mercancías enviadas con el análisis de distribución para optimizar sus operaciones de transporte; colaborar entre las entidades a través de la red de negocios para optimizar el rendimiento y los beneficios.
- Hacer mantenimiento predictivo y gestión de activos y servicios de campo, que permite predecir el mal funcionamiento del equipo, llevar a cabo de forma proactiva el servicio de mantenimiento y sustituir las piezas defectuosas antes de un colapso del sistema. Esto significa menores costos de mantenimiento y de servicios, aumenta el tiempo de actividad de los activos y mejora el servicio al cliente.
- Obtener una visión más profunda en el comportamiento del consumidor y utilizar el análisis predictivo para optimizar la mezcla de productos. Reponer los niveles de inventario con información de la demanda en tiempo real, combinado con factores ambientales.
Fuente: SAP